Jueves de Misterio: 'Eyes Wide Shut'.


  La última película dirigida por ese dios de la interpretación que era, es y será Stanley Kubrick se mueve entre las aguas del drama y el thriller, en la que Tom Cruise (actor que por envidias o juicios morales gratuitos no tiene el reconocimiento que merece) encarna a Bill Harford, un acomodado doctor neoyorkino que se dispone a asistir con su mujer Alice (Nicole Kidman), a la fiesta que su amigo, Victor Ziegler (Sidney Pollack), va a organizar en sus aposentos...

La pareja, a la que desde un primer momento vemos presos de  una especie de mascarada en la que nunca son del todo sinceros el uno con el otro, van coqueteando por separado con otros invitados...

A partir de aquí la película se torna en un asfixiante relato que plasma una realidad un tanto onírica, en la que  el personaje de Tom Cruise acaba infiltrándose en una super elitista sociedad secreta en la que nadie enseña su verdadero rostro pero todos tienen en común la riqueza, el poder y la afición por organizar orgías...

La película plantea curiosas reflexiones sobre el matrimonio, la infidelidad, el deseo sexual, y la pérdida de la intimidad-privacidad, y sobre todo es un muestrario de aquello que Freud llamaba pulsiones,

Con una excelente dirección (pese a no ser el Kubrick más inspirado), y una banda sonora en la que destacan las composiciones de Jocelyn Pook con unos temas entre lo exótico y lo aterrador.


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